Cuando alguien me pregunta solamente por el precio de un cachorro, sin importar nada más que el precio, procedo siempre indicando precios muy superiores a los que se suelen pedir por un cachorro, ya que no hay interés alguno en conocer ni a sus padres, abuelos, ninguno de sus ancestros tiene interés en la pregunta, todo rápido, barato y eso sí, que no tenga problemas. Quien se queja del precio de un cachorro, no se ha puesto a hacer números de los costes que supone en los siguientes años que van a compartir su vida con un westie. Pero claro, la perorata de siempre, que si el cachorro pudiera elegir viviría mejor en su casa que en la de otra persona, que va a ser cuidado y mimado. ¿Es verdad?.
Aunque me voy a dejar miles de cosas por el camino, intentaré explicar de una forma breve y concisa que conlleva realmente el precio de un cachorro de westy, que está lleno de intangibles y que además son cuestiones que no se pueden valorar:
- Una correcta selección de machos y hembras sin taras genéticas, equilibrados en salud y en carácter. Incluye desde el coste de los progenitores, montas externas y todo lo relacionado con la compra de los mejores ejemplares seleccionados para los procesos reproductivos, los cuales deben cumplir unos mínimos para forma parte de nuestro kennel (por ejemplo que sean CMO-0 entre otros miles de datos adicionales).
- Pruebas genéticas que demuestran que no tienen/padecen las enfermedades típicas de la raza, teniendo unos costes elevados, que los veterinarios que pueden hacer muchas de ellas no están accesibles y están lejos de tu residencia.
- Planificar las camadas. ¿Qué quiere decir esto? Pues que hay que saber que hembra con que macho, analíticas de salud, ver si ambos están bien para el momento que les toque reproducir, etc.…
- Costes de alimentación de progenitores y de cachorros. Alimentación adecuada para cada edad y momento, no come lo mismo un cachorro con 3 semanas de edad que una hembra gestante.
- Costes de vacunas, desparasitaciones y resto de cuidados.
- Costes relacionados con la higiene, de los sitios en los que viven los progenitores, resto de ejemplares y sobre todo de los cachorros.
- Los arreglos de peluquería, bien sea con el arreglo de exposición o de mantenimiento
- Costes indirectos, como es la luz (mantas eléctricas, aire acondicionado)… El agua, tanto la propia de consumo como la necesaria para su higiene y la de las instalaciones… Y suma y sigue… Camas, cunas, transportines, parideras, parques, empapadores…
- Si el parto ha ido bien, y no ha habido bajas o incidencias, como una cesárea por ejemplo, la correcta alimentación de la madre y de los cachorros en los tiempos adecuados…
- El tiempo en el que se realizan los controles, seguimiento de su crecimiento, los tiempos en los que se les socializa tanto humana como de forma canina, enseñanzas para hacer sus cositas en empapadores y en la calle, enseñar al manejo, meter mano en comederos, tocar bocas, almohadillas, patas, orejas y resto del cuerpo, acostumbrar a baño, que no haya fobias ni miedos…
Cuando alguien se lleva un cachorro de westy criado por nosotros, adquiere muchas cosas que no se ven, pero que existen y que están ahí, y que es una gran parte de nuestra esencia y ser. Cuando el cachorro llega a las manos de sus nuevos propietarios, cuando se ve que se desprende un apéndice tuyo pero que cuándo llega a su nuevo hogar, se ve que la integración es inmediata y que no existe ansiedad por separación de su madre, hermanos y el resto de su manada humana y perruna y disfrutando de cada nuevo instante, eso no tiene precio.
